Correr por un aeropuerto con el corazón en la garganta es una escena demasiado cotidiana. Eso le ocurrió a una pasajera que el 26 de julio de 2024 salió de Santander rumbo a Madrid para volar después a Cuba. El Alvia, que debía llegar a las 11:19 horas, encadenó retrasos, un transbordo por carretera y un cambio de tren. Cuando alcanzó Barajas, la facturación ya estaba cerrada y el avión a punto de despegar. Tocó comprar a toda prisa otro billete a La Habana por 1.046,24 euros, más taxis. Al reclamar, Renfe solo le devolvió 59,50 euros del billete de tren; tras acudir a Facua-Consumidores en Acción y a la Junta Arbitral del Transporte de Cantabria, la compañía tuvo que abonar 1.099,89 euros por los gastos del avión y los taxis.
¿Qué pasó con el tren del 26 de julio y por qué se perdió el vuelo?
El plan era sencillo: un Alvia Santander–Madrid con llegada prevista a las 11.19 horas para disponer de más de tres horas hasta el vuelo en Barajas. Sin embargo, el trayecto se torció desde el inicio: el tren salió de Santander con 45 minutos de retraso por un problema en las puertas y, poco después, una avería a la altura de Torrelavega obligó a un transbordo por carretera hasta Valladolid para enlazar con otro tren a Madrid. En consecuencia, la pasajera se quedó sin embarcar en su vuelo original a Cuba y tuvo que rearmar el viaje sobre la marcha. Lo que iba a ser un trasbordo tranquilo al aeropuerto se convirtió en una contrarreloj con final amargo.
Para no perder el día, la afectada compró un nuevo billete a La Habana por 1.046,24 euros con otra aerolínea, cuyo vuelo salía dos horas más tarde. Después, reclamó a Renfe tanto ese gasto como los taxis hasta Barajas, pero la compañía únicamente le pagó 59,50 euros correspondientes al billete de tren Santander–Madrid. No está mal… salvo porque la factura gorda no estaba precisamente en esos 59,50. A continuación, un resumen claro de importes y conceptos:
| Concepto | Importe | Situación |
|---|---|---|
| Nuevo billete de avión a La Habana | 1.046,24 € | Pagado por la pasajera |
| Gastos de taxis (hasta Barajas) | 53,65 € | Pagados por la pasajera |
| Total por avión + taxis abonado por Renfe tras el proceso | 1.099,89 € | Abonado por Renfe |
| Reembolso inicial de Renfe (billete de tren) | 59,50 € | Pagado por Renfe |
Como se ve, el coste del taxi se deduce de la suma total: 1.099,89 € menos 1.046,24 € son 53,65 €. Por lo tanto, la diferencia entre el “detalle” inicial de 59,50 € y lo finalmente abonado por Renfe supera claramente los 1.000 euros.
¿Qué resolvió la Junta Arbitral del Transporte de Cantabria?
Tras la reclamación, la pasajera pidió ayuda a Facua-Consumidores en Acción, que remitió el caso a la Junta Arbitral del Transporte de Cantabria. Este organismo resolvió a su favor y obligó a Renfe a asumir los gastos del nuevo billete y los taxis.
En su resolución, la Junta consideró que la compañía incumplió «su obligación principal» y apreció «falta de diligencia empresarial que va más allá de una mera conducta culpable». En términos sencillos, entendió que no se prestó el servicio de forma adecuada y que la actuación fue claramente insuficiente.
¿Qué pasos puedes seguir si te ocurre algo parecido?
En primer lugar, guarda todos los justificantes: billete de tren, comprobantes de taxi y, si te ves obligado a comprar otro vuelo, el nuevo billete. Son la base de cualquier reclamación sólida.
Por otro lado, presenta tu reclamación a la empresa ferroviaria solicitando el abono de los gastos derivados de la incidencia (como hizo la afectada con el billete de 1.046,24 € y los taxis). Detalla fechas, horas exactas (por ejemplo, la llegada prevista a las 11:19) y el retraso acumulado.
Si la respuesta no te resuelve el problema, pide apoyo a Facua-Consumidores en Acción para que el caso se remita a una Junta Arbitral del Transporte, como ocurrió aquí. De ahí que, cuando la resolución te da la razón, la compañía deba abonar lo que corresponda, tal y como pasó con los 1.099,89 € por avión y taxis. Entra en la sección de trámites para saber como resolver incidencias burocráticas.
