Como si de la guarida de las tortugas ninja se tratase, existen 5 estaciones del Metro de Madrid que permanecen abandonadas. Este transporte público es el más usado de la ciudad, con aproximadamente 2 millones de personas que se montan en él a diario. Con estos datos, cabría pensar que es inviable tener estaciones cerradas, sin ningún tipo de uso, pero no, Madrid cuenta con estos tramos “fantasma”, que por motivos concretos permanecen cerradas después de más de dos décadas. A continuación mostramos que estaciones son las que se mantienen con las “persianas bajadas”.
¿Cuáles son las estaciones del Metro de Madrid que continúan cerradas?
Para poner en contexto, estas estaciones del Metro de Madrid formaban parte de lo que se llamaba Metrosur, que unía los municipios del sur. Pero he aquí el problema, se preveía en mayor crecimiento demográfico en ciertas zonas, que no ha acabado llegando. Las cinco estaciones que aquí vamos a tratar formaban parte de las 28 que inauguró, allá por 2003, el expresidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. A continuación nombramos cada una de ellas, pertenecientes a la línea 12:
- La Pollina, entre Arroyo Culebro y Parque de los Estados.
- El Vivero, entre Hospital de Fuenlabrada y Loranca.
- Poza del Agua, en la zona de Puerta del Sur.
- Los Rosales, entre Manuela Malasaña y Hospital de Móstoles.
- Móstoles Sur, entre Móstoles Central y Universidad Rey Juan Carlos.
Ahora bien, ¿son estaciones construidas? La respuesta es no. Aunque muchas personas hablan de ellas como estaciones con utilidad, a día de hoy no son más que un gran agujero en el que se podría construir. Según Adrián Fernández, responsable de movilidad de Greenpeace, lo que se planteó fue crear “una reserva de trazado dentro del itinerario”. A día de hoy, seguimos sin visos de que vayan a construirse, o al menos, mientras las zonas “afectadas” no crezcan.
¿Hay alguna estación que esté en desuso?
Dentro de las estaciones del Metro de Madrid “abandonadas”, existe una que sobresale por encima del resto y que lleva sin usarse desde el año 1966: Chamberí. Fue diseñada por Antonio Palacios y, tras décadas de abandono, la película Barrio de Fernando León de Aranoa la devolvió a la actualidad en 1998. A pesar de no usarse como estación para transporte público, se podrá visitar, dentro de los horarios establecidos, ya que pasó a ser un museo, el cual merece la pena visitar. Su entrada es gratuita, así que no hay excusa para no acercarse y conocer un poco más de la historia de nuestra ciudad.
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