¿Aún esperas la lechuza de Hogwarts con tu nombre? No te preocupes, no eres el único que sigue mirando al cielo por si aparece Hedwig con un sobre amarillo. Madrid acaba de abrir un atajo al castillo más famoso de la literatura juvenil: Andén 9 y ¾, un restaurante temático donde las velas flotan de verdad y las gyozas llegan a la mesa con hechizo incluido. Ubicado en pleno barrio de Salamanca, este local borra la rutina en cuanto cruzas la puerta y saca al niño mago que muchos llevan escondido tras la corbata. Con un precio cerrado de 24,95 € que incluye dos platos y la opción de sumar más hechizos culinarios por 2 € cada uno, promete diversión, fotos y una pizca de nostalgia bien servida. Y sí, aquí los adultos con hipoteca también tienen plaza reservada.
¿Dónde está y qué te espera al cruzar la puerta de Hogwarts?
Andén 9 y ¾ se esconde en el número 75 de la calle José Ortega y Gasset. Nada más entrar, las luces bajas y los vitrales encantados avisan de que la noche va de magia, no de cuentas pendientes.
- Candelabros suspendidos que flotan sobre las mesas
- Mesas “susurrantes” que sueltan frases al oído (literal)
- Una cabeza de Dobby asomando por la pared para selfies instantáneos
Por consiguiente, el ambiente es tan inmersivo que neutraliza cualquier atisbo de rutina: aquí se viene a jugar, a reír y a devorar Croquetas del Bosque Prohibido o Coronas de Mandrágora Asada sin miedo al qué dirán.
Cada comensal paga 24,95 € y elige dos platos del Menú Mágico: desde Coliflores del Callejón Knockturn (con lluvia de queso manchego) hasta Huevos Estrellados del Snidget Dorado con trufa negra. ¿Te quedas con hambre? Añadir un tercer plato, o un cuarto, cuesta solo 2 € adicionales; un precio casi tan increíble como un giratiempo bien usado. Además, aunque el decorado pueda sonar infantil, la atmósfera resulta sorprendentemente adulta, elegante y con un puntito oscuro que lo convierte en plan ideal para una primera cita o una celebración potterhead de sábado noche.
¿Hay que reservar con tiempo?
Reserva con antelación o te quedarás sin entrar en Hogwarts: las mesas vuelan más rápido que una Nimbus 2000 y la lista de espera de muggles entusiasmados crece a diario. Posteriormente, plantéate pedir los platos “extra” de dos en dos; por el mismo hechizo logístico te llegan calientes y evitas malgastar galeones. No te olvides de preguntar al camarero por la bebida “poción burbujeante”: es el guiño perfecto a la saga y, de paso, refresca la cartera más que un hechizo Aguamenti.
Por otro lado, si vas en grupo, pactad turnos para las fotos; así no bloquearéis el pasillo principal y podréis disfrutar del espectáculo de candelabros flotantes sin prisas. Finalmente, lleva batería extra en el móvil (sí, en serio): entre vitrales que cambian de forma y dim sum “encantados”, la memoria del teléfono se llena tan rápido como el Gran Comedor en Navidad. En nuestra sección de actualidad podrás encontrar más ofertas gastronómicas de Madrid.