El Ayuntamiento de Madrid abandonará el criterio de motor y carburante para las bonificaciones del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) y lo vinculará a las etiquetas ambientales. La medida incluye una bonificación del 50% para grandes flotas con vehículos CERO, ECO y C.
La delegada de Hacienda, Engracia Hidalgo, presentó el proyecto de ordenanzas fiscales para 2026, que persigue «reducir la contaminación generada por los vehículos de motor». Se trata, según se subraya, de «una medida pionera en España» al sustituir el modelo anterior por uno apoyado en distintivos ambientales.
El Ayuntamiento de Madrid alinea el IVTM con etiquetas ambientales y con la tasa SER
Con este cambio, se coordinan los criterios del IVTM y de la tasa SER (Servicio de Estacionamiento Regulado), que ya se basa en las etiquetas de los vehículos. La reforma armoniza ambos instrumentos y corrige situaciones específicas para mejorar la coherencia del sistema. Uno de los ajustes afecta a los híbridos enchufables, que tendrán una bonificación distinta según su autonomía eléctrica sea mayor o no de 40 kilómetros. Al usar las etiquetas, se aplica un baremo que describe mejor lo que contaminan los vehículos.
El proyecto incorpora una bonificación específica del 50% a los vehículos menos contaminantes de las grandes flotas (CERO, ECO y C), propietarias de miles de vehículos que circulan diariamente por la ciudad. La rebaja busca incentivar un parque móvil más limpio en sectores con alto volumen de circulación. Para acceder a esta bonificación, las flotas deberán matricular sus vehículos en Madrid y renovar anualmente un porcentaje por otros con etiquetas menos contaminantes. Con esta condición, «se pretende combatir la deslocalización de las flotas de vehículos que operan en la capital, pero están matriculados en otros municipios».
Medida pionera en España y objetivos de reducción de la contaminación
La modificación del ‘numerito’ se presenta como «una medida pionera en España»: cambia el criterio para aplicar las bonificaciones, pasando del tipo de motor y carburante a los distintivos ambientales, que describen mejor lo que contaminan los vehículos. Así, el tratamiento fiscal se alinea con el comportamiento real de las emisiones.
Dado lo anterior, el Ayuntamiento pretende incentivar la renovación hacia vehículos con etiquetas más favorables y armonizar la fiscalidad con la regulación del estacionamiento. En términos prácticos, las bonificaciones del IVTM dejarán de depender del motor y del carburante para medirse por la etiqueta asignada a cada vehículo.
El anuncio se enmarca en la presentación del proyecto de ordenanzas fiscales para 2026. Se abre un nuevo esquema que premia a los vehículos menos contaminantes y pone el foco en las grandes flotas, con una bonificación del 50% condicionada a la matriculación en Madrid y a la renovación anual hacia etiquetas menos contaminantes. Entra en nuestra sección de motor para conocer todas las novedades en materia de vehículos.









