El Gobierno ha aprobado un anteproyecto que permite compatibilizar prestaciones del sistema de dependencia con empleo, incluido el autoempleo. Es una demanda histórica del sector para evitar que las personas con discapacidad tengan que elegir entre trabajar o conservar apoyos esenciales. Sobre el papel, el cambio es relevante, pero tendrá letra pequeña.
Qué cambia con el proyecto: compatibilidad entre prestaciones de dependencia y trabajo
El texto reconoce que una persona puede trabajar parcialmente (incluso como autónomo) y, a la vez, necesitar apoyo para actividades básicas. “Es una reforma que rompe con la lógica binaria que ha imperado hasta ahora”, afirmó Daniel‑Aníbal García Diego (Cocemfe). ¿Qué cambia en la práctica? Que ya no habría que renunciar a la ayuda por tener ingresos.
Antes, explica García, trabajar incluso unas horas podía conllevar la pérdida de apoyos como la asistencia personal o la ayuda a domicilio. Para evitarlo, señala tres tipos de ayuda que no deberían excluirse cuando exista actividad por cuenta propia:
- Asistencia personal, ayuda a domicilio y prestaciones económicas vinculadas a servicios o cuidados familiares.
En su planteamiento, el hecho de generar ingresos no elimina la necesidad de apoyo; se trata de adaptar el sistema a realidades cambiantes, no de duplicar ayudas.
Quién puede beneficiarse y cómo afectará a autónomos y pequeñas empresas
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) califica la iniciativa como “una reforma largamente esperada”, aunque advierte que su efectividad dependerá de voluntad política y dotación económica. ¿Se trata de una nueva obligación para las empresas? García aclara que “La ayuda no va a la empresa, va a la persona”.
Además, pide que nadie frene contrataciones “por miedo al papeleo o a un posible coste. Esto tiene que ser una oportunidad, no un problema”. De hecho, reclama que el coste no recaiga en autónomos ni en pequeños negocios. Ojo: sin financiación estable, el avance podría quedarse corto.
El abogado laboralista Jaume Barcons recuerda que es un proyecto aún enmendable y alerta de desequilibrios normativos, financieros y jurídicos. “Permitir trabajar mientras se cobra una prestación por incapacidad o dependencia va contra la lógica del propio sistema, tal y como está hoy diseñado”. ¿Se puede trabajar si te han reconocido incapacidad absoluta? Los tribunales han reiterado que pensiones como la absoluta o la gran invalidez son incompatibles con cualquier trabajo remunerado.
Si no se ajustan categorías de incapacidad y evaluación médica, podría crearse una contradicción: permitir trabajar a quien fue reconocido como incapacitado para toda actividad, con riesgo de inseguridad jurídica.
Financiación, voluntad política y desigualdad territorial según las comunidades autónomas
Barcons cuestiona la sostenibilidad financiera: “¿quién paga eso? Lo acabará asumiendo el propio tejido productivo, vía impuestos o cotizaciones”. García añade que “Si esto queda solo como una declaración en el BOE, no servirá de nada”. Además, las comunidades mantendrán su capacidad para fijar regímenes de compatibilidad, lo que puede generar desigualdades territoriales; el sector pedirá mínimos garantizados en todo el país. A continuación, resumimos los condicionantes clave del anteproyecto:
Aspecto | Clave señalada |
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Riesgos legales | Incompatibilidades reforzadas por sentencias en absoluta y gran invalidez |
Financiación | Depende de voluntad política y dotación; riesgo de trasladar costes a empresas |
Aplicación autonómica | Cada comunidad regula compatibilidades; posible desigualdad territorial |
Trámite parlamentario | Remitido al Congreso el 15 de julio; pendiente de Congreso y Senado |
En consecuencia, la efectividad real dependerá de presupuesto y de una aplicación homogénea.
Calendario parlamentario y reclamaciones del sector para impulsar el autoempleo
El texto fue remitido al Congreso el 15 de julio y debe superar Congreso y Senado. Ahí se fijará qué ayudas serán compatibles, cómo se evaluarán los casos y si la aplicación autonómica será uniforme. El sector también trabaja en una nueva Ley del Empleo con medidas específicas para el autoempleo de personas con discapacidad. Como resume García: “Hay consenso político y sensibilidad social, ahora solo falta voluntad presupuestaria”. Entra en nuestra sección de trámites para conocer cómo se realizan otras gestiones administrativas.