Volver a trabajar tras la jubilación solo es posible en modalidades concretas y comunicándolo a la Seguridad Social, que puede suspender la pensión y reclamar lo cobrado.
La jubilación ordinaria en 2025 en España se sitúa en 66 años y ocho meses para quienes han cotizado menos de 38 años y tres meses y en 65 años para quienes superan ese periodo. Desde ese momento surge la duda: ¿qué pasa si luego quiero volver a trabajar?
Cómo afecta a la pensión de jubilación de la Seguridad Social volver a trabajar
La Seguridad Social permite volver a la vida laboral mediante modalidades específicas, como la jubilación activa, la jubilación flexible o el trabajo por cuenta propia con ingresos limitados, siempre que se cumplan los requisitos necesarios. Fuera de esos modelos, el cobro de la pensión es incompatible con el trabajo en cualquiera de los regímenes del sistema.
Así lo recoge la Ley de la Seguridad Social, en su artículo 213, donde se indica que: «El disfrute de la pensión de jubilación será incompatible con la realización de cualquier trabajo del pensionista, ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia, que dé lugar a su inclusión en cualquiera de los regímenes del sistema de la Seguridad Social».
Además, añade que: «El reconocimiento del derecho a la pensión de jubilación y su percepción será incompatible con el trabajo, salvo en los casos expresamente previstos en la ley. La realización de trabajos incompatibles con la pensión determinará la suspensión del abono de la misma durante el tiempo en que se mantenga la actividad». Conviene tener presentes las edades ordinarias de jubilación en 2025, según el periodo de cotización acreditado:
| Años cotizados | Edad legal de jubilación ordinaria en 2025 |
|---|---|
| Menos de 38 años y tres meses | 66 años y ocho meses |
| 38 años y tres meses o más | 65 años |
Requisitos de la Seguridad Social para compatibilizar jubilación y trabajo legalmente
Con estos límites legales, la pregunta es clara: ¿qué ocurre si, una vez jubilado, quiero volver a trabajar? La Seguridad Social contempla esa posibilidad, pero únicamente a través de figuras concretas y respetando sus condiciones. Entre las opciones que recoge la normativa se encuentran:
- Jubilación activa.
- Jubilación flexible.
- Trabajo por cuenta propia con ingresos limitados.
Estas fórmulas permiten compatibilizar la pensión con una actividad laboral, pero siempre dentro de los límites que marque la ley. Por eso es fundamental acogerse al modelo correcto antes de reincorporarse al trabajo.
Porque si se vuelve a trabajar sin comunicarlo a la Seguridad Social o al margen de estas modalidades, la consecuencia puede ser seria: la pensión se suspende y, probablemente, haya que devolver lo cobrado indebidamente. En nuestra sección de prestaciones encontrarás multitud de noticias de interés para los pensionistas.
