Si te has pasado más de un verano huyendo del asfalto madrileño, seguro que has fantaseado con un chapuzón XXL lejos del ruido y las prisas. Imagínate nadar sin darte la vuelta cada diez brazadas, sentir el frescor de los pinos en la cara y, de paso, presumir de “piscinón” en tu grupo de WhatsApp. Pues bien, ese paraíso existe, está a una hora exacta de la capital y presume de récord nacional. Aquí no hablamos de una pileta cualquiera, sino de una tan larga como dos campos de fútbol en fila india. ¿Demasiado bonito para ser verdad? Sigue leyendo, que los datos mandan.
¿Dónde está y qué la hace tan colosal?
En pleno corazón de la sierra de Guadarrama, exactamente en Buitrago de Lozoya (Madrid), se alza la piscina del área recreativa de Riosequillo, inaugurada el 12 de junio de 1993. No es una charca improvisada: la gestiona el Canal de Isabel II, tiene agua tratada con cloro y su borde parece fundirse con el embalse vecino como si fuese una “infinity pool” de revista.
Dato clave | Cifra exacta |
---|---|
Longitud total | 200 m |
Superficie de lámina de agua | 4.200 m² |
Capacidad de bañistas | 2.300 personas |
Extensión de zona verde | 10,8 ha |
Plazas de aparcamiento | 700 coches |
Años en funcionamiento | 32 (abierta desde 1993) |
Por tanto, hablamos de la piscina lineal más grande de España, compuesta en realidad por dos vasos (uno de adultos y otro infantil) y rodeada de olmos, encinas, fresnos y acacias que alivian los 35 °C veraniegos como si fuese aire acondicionado natural.
¿Cómo llegar y cuándo abrirá la puerta?
Llegar es tan sencillo como tomar la A‑1 hasta el kilómetro 74 y seguir las indicaciones hasta Buitrago de Lozoya; en coche tardarás unos 60 minutos desde la M‑30. El recinto abre de martes a domingo, de 11:00 a 20:00 h, y cierra estrictamente los lunes para mantenimiento.
Eso sí, las entradas (una por persona y solo en taquilla) vuelan más rápido de lo que canta un gallo: el aforo legal es de 2.300 bañistas y, cuando se llena, las puertas se clausuran sin excepciones. Por consiguiente, conviene llegar al menos 30 minutos antes de la apertura si quieres aparcar sin rodeos y plantar tu toalla en primera línea.
Consejos para aprovecharla sin agobios
En primer lugar, lleva efectivo suelto: la taquilla y el chiringuito aceptan tarjeta, pero el merendero a veces solo cobra en metálico, y no querrás quedarte sin tu bocata de calamares. Además, recuerda que el agua proviene del embalse(aunque clorada), de ahí que la temperatura ronde los 22 °C incluso en agosto; una sudadera ligera para el atardecer no sobra.
Posteriormente, si vas en familia, localiza el parque infantil y la piscina pequeña antes de instalarte. En consecuencia, los peques estarán entretenidos y tú evitarás la peregrinación bajo el sol con la colchoneta a cuestas. Y, por cierto, no olvides revisar las normas: está prohibido reservar espacio con sombrillas sin presencia física(quien no esté, se queda sin sitio), una regla que la megafonía recuerda con un humor bastante castizo.