La Dirección General de Tráfico está desplegando un sistema automático que sanciona una maniobra concreta y habitual: pisar la línea continua en las incorporaciones. El objetivo es atajar una conducta que genera riesgo de colisiones laterales en los tramos de acceso a vías de alta capacidad. En este artículo vamos a dar las claves de esta mala praxis conduciendo.
La DGT pone en marcha cámaras para sancionar el pisado de la línea continua en incorporaciones a vías rápidas
El dispositivo combina dos cámaras sincronizadas. Una de ellas vigila la vía de aceleración y la otra el carril derecho de la calzada principal. Si el vehículo aparece primero en la incorporación y, antes de que termine la línea continua, es detectado acto seguido en el carril derecho, el sistema concluye que no se respetó la señalización. Con ese registro, la evidencia se remite al Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas (CTDA) de la DGT, que se encarga de la tramitación de la sanción. La infracción está castigada con 200 euros.
Según la consultora de defensa de los automovilistas Pyramid, ya se han instalado cuatro cámaras en puntos estratégicos de la red: A‑1, km 15,95 (sentido decreciente); A‑2, km 11,8 (sentido decreciente); A‑42, km 16,9 (sentido decreciente); y A‑6, km 20,2 (sentido decreciente). Estos tramos se han seleccionado por su elevada densidad de tráfico y por la frecuencia de maniobras indebidas en las zonas de incorporación, donde el pisado de la línea continua incrementa el riesgo de impactos laterales.
La eficacia del control se basa en la sincronización entre ambas cámaras y en la lectura secuencial de las imágenes. La detección en la vía de aceleración seguida de la presencia inmediata en el carril derecho, sin que haya finalizado la línea continua, constituye la prueba de la maniobra prohibida. Una vez verificada la secuencia, el material se envía al CTDA para su gestión. Este circuito permite automatizar el proceso sancionador y focalizar la vigilancia en una conducta concreta que afecta a la seguridad en los accesos.
Nuevas multas de 200 euros y el plan de radares de la DGT para 2025
La multa por pisar la línea continua en incorporaciones asciende a 200 euros. Con la puesta en marcha de estas cámaras, la DGT refuerza el control de una práctica que acorta indebidamente la incorporación y compromete la convivencia con los vehículos que circulan por el carril derecho.
La medida se enmarca en el plan de la DGT para 2025, que prevé la instalación de más de un centenar de nuevos radares en toda España, tanto fijos como de tramo. En conjunto, el despliegue apunta a una supervisión más precisa de comportamientos de riesgo en puntos sensibles de la red viaria. Si quieres conocer más noticias de la DGT, entra en nuestra sección de motor.
