En los últimos años, las pegatinas A, B y C de la Dirección General de Tráfico (DGT) se han convertido en un elemento familiar en el parabrisas de nuestros vehículos. Pero, ¿qué significan realmente estas etiquetas? ¿Qué criterios se utilizan para clasificar los coches y qué implicaciones tienen estas clasificaciones en nuestro día a día? En este artículo, desvelaremos los secretos que esconden estas pequeñas pegatinas y su importancia en la movilidad sostenible
¿Qué significan las letras A, B y C de la DGT?
Las etiquetas medioambientales de la DGT son un sistema de clasificación que permite identificar el nivel de emisiones contaminantes de un vehículo. Esta clasificación se basa en la tecnología del motor y en las emisiones de gases contaminantes, como los óxidos de nitrógeno y las partículas en suspensión. A cada vehículo se le asigna una etiqueta, que va desde la A (cero emisiones) hasta la C (emisiones más elevadas), en función de su impacto ambiental. Este es el significado de las etiquetas:
- Etiqueta Cero emisiones (azul): Corresponde a los vehículos eléctricos puros y a los híbridos enchufables con una autonomía eléctrica mínima de 40 kilómetros. Estos vehículos no emiten gases contaminantes durante su funcionamiento y, por tanto, son los más respetuosos con el medio ambiente.
- Etiqueta ECO (verde y azul): Se asigna a los vehículos híbridos no enchufables y a los de gas natural. Estos vehículos emiten menos contaminantes que los de gasolina o diésel convencionales, pero no son completamente libres de emisiones.
- Etiqueta C (verde): Corresponde a los vehículos de gasolina matriculados a partir de 2006 y a los diésel matriculados a partir de 2014. Estos vehículos cumplen con las normativas Euro 4, 5 y 6. Esto significa que sus emisiones son inferiores a las de los vehículos más antiguos.
- Etiqueta B (amarilla): Se asigna a los vehículos de gasolina matriculados a partir del año 2000 y a los diésel matriculados a partir del año 2006. Estos vehículos cumplen con las normativas Euro 3, 4 y 5.
Las etiquetas medioambientales tienen un papel fundamental en la lucha contra la contaminación atmosférica y el cambio climático. Gracias a ellas, las administraciones públicas pueden establecer restricciones de circulación en zonas de bajas emisiones, favorecer el uso de transporte público y promover la compra de vehículos menos contaminantes. Además, las etiquetas permiten a los conductores identificar los vehículos más eficientes y respetuosos con el medio ambiente.
Significado de los códigos de las pegatinas
Todas estas etiquetas de diseño circular incluyen un código QR en el que se almacenan algunos datos del coche como el año de matriculación, la marca y el modelo, entre otros. En ella también distinguirás un número asignado al distintivo y un recuadro con la matrícula del vehículo y la fuente de energía que emplea. Para cualquier duda que aparezca respecto al uso de las pegatinas, la DGT dispone de un teléfono de atención al ciudadano: 060.
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