Hay pasiones de infancia que se quedan en la estantería y otras que, con paciencia y un poco de osadía, se convierten en trabajo de vida. En pleno centro de Madrid, Diego levantó hace más de dos décadas un auténtico “templo” del Scalextric. Lo que empezó como hobby terminó en empresa con 22 años de historia.
Dejó su profesión para dedicarse al slot (coches a escala que circulan por una pista eléctrica). Hoy su proyecto reúne a coleccionistas y amantes de esta afición de todo el mundo. Y todo con una idea sencilla pero exigente: precisión, tiempo y cero prisas.
¿Cómo nació este ‘templo’ del Scalextric en Madrid?
Hace más de dos décadas, Diego tomó la decisión de dejar su profesión para dedicarse a lo que le hacía feliz: el mundo del Scalextric. Su familia estuvo ahí desde el minuto uno. Con el tiempo, la afición se transformó en empresa y, por tanto, en punto de encuentro. De ahí que hoy su espacio reúna a coleccionistas y amantes del slot de todo el mundo, atraídos por piezas que no son meros adornos, sino máquinas en miniatura pensadas para la pista.
El proceso de fabricación de cada coche puede durar hasta dos años. No es un modelo estático: es una maqueta funcional que debe comportarse en la pista como un vehículo real. Por eso, además de gusto por el detalle, se necesita una dosis generosa de paciencia (y sí, aquí “añadir al carrito” no acelera nada).
¿Qué debes saber si te animas al automodelismo en pista?
Si te pica el gusanillo, conviene aterrizar expectativas. Estos coches están pensados para la pista y requieren tiempos largos de desarrollo: hasta dos años por unidad. Esto quiere decir que cada modelo es, además de vistoso, una pieza diseñada para comportarse en carrera de forma realista. Con eso en mente, ten presentes estas claves prácticas para moverte en este mundo sin tropezar con la impaciencia.
- Asume los plazos: cada coche puede requerir hasta 2 años de trabajo.
- Prioriza la funcionalidad: busca que el coche se comporte en pista como uno real.
- Olvídate de la producción masiva: aquí manda la artesanía con ingeniería.
- Si coleccionas o simplemente te encanta el slot, este es un punto de encuentro a tener en el radar.
Por otro lado, recuerda que la gracia está en el detalle y rendimiento: no es una figura de vitrina, es un coche para correr. El valor de estas piezas está tanto en lo que se ve como en lo que hacen cuando tocan la pista de Scalextric. Puedes acceder a nuestra sección de actualidad para conocer otros negocios con encanto de nuestra ciudad.