El Consejo de Ministros ha aprobado el Real Decreto de Comedores Escolares Saludables y Sostenibles, que introduce cambios de gran calado en la alimentación de los estudiantes en España. La normativa establece la obligatoriedad de ofrecer cinco comidas saludables a la semana en todos los centros educativos con comedor, incluyendo la eliminación de la bollería industrial y la restricción de la venta de bebidas azucaradas y energéticas. Además, se exige incluir pescado entre una y tres veces por semana y proporciona alternativas alimentarias por motivos éticos, religiosos o de salud, incluyendo menús 100% vegetales.
¿Cuáles son los cambios más significativos del Real Decreto?
La medida promueve un mayor consumo de legumbres, cereales integrales y proteínas de origen vegetal, y requiere que al menos el 45% de las frutas y hortalizas sean de temporada. Asimismo, se limitará el uso de platos precocinados y fritos. Este Real Decreto aterriza en nuestras vidas para mejorar la salud nutricional de los estudiantes. Fue elaborada por varios ministerios y se enmarca en la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición de 2011 y el Plan Estratégico Nacional para la Reducción de la Obesidad Infantil 2022-2030. ONG como Educo celebran la medida, pero advierten que aun muchos niños no tienen acceso al comedor escolar ni a ayudas durante las vacaciones.
La nueva normativa establece que todos los centros educativos, independientemente de su titularidad, deben ofrecer menús escolares saludables y sostenibles. Entre las medidas clave, se establece el consumo diario de frutas y verduras frescas (al menos un 50% de temporada), la inclusión de pescado entre una y tres veces por semana y arroz o pasta integral al menos una vez. Se limita el consumo de platos precocinados y fritos a una vez al mes y se prohíben refrescos y bebidas energéticas en todo el entorno escolar, incluidas máquinas expendedoras y cafeterías.
Además, se exige menús adaptados a necesidades éticas, religiosas o médicas. Un punto importante para que haya salido adelante este Real Decreto es, reducir la obesidad infantil, especialmente entre niños de familias con bajos ingresos, y fomentar hábitos nutricionales saludables, beneficiando potencialmente a más de dos millones de estudiantes que utilizan comedores escolares. Las comunidades autónomas serán responsables de su aplicación.
¿Cómo se aplicará la normativa?
El Real Decreto tiene como objetivo garantizar que todos los niños y niñas tengan acceso a alimentos sanos, ya que, según el Estudio ALADINO, quienes pertenecen a familias de rentas bajas tienen más exceso de peso, consumen más bebidas azucaradas y presentan una menor ingesta de frutas y verduras. La normativa también busca trasladar a todos los comedores escolares, los estándares fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en lo que respecta a la alimentación infantil.
Además de garantizar el consumo diario de frutas y verduras frescas y de evitar el consumo de bebidas azucaradas en las comidas, la norma también asegurará que todos los comedores escolares, independientemente de su titularidad, ofrezcan carne y pescado de calidad, y aumenten la cantidad de legumbres y cereales en sus menús. El ministro Pablo Bustinduy ha recordado que el Real Decreto apostará por los circuitos cortos de producción y por los alimentos de cercanía para acceder así a productos más sostenibles, de calidad y que fomenten las economías locales.
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