El artículo 20 bis del Estatuto de los Trabajadores consagra el derecho a la desconexión digital y protege la privacidad de los empleados españoles más allá de la jornada laboral. La reforma laboral aprobada en 2025 refuerza la frontera entre trabajo y vida personal: a partir de ahora, cualquier empresa que insista en contactar a su plantilla fuera del horario pactado podrá ser sancionada con hasta 7.500 euros, según confirma el nuevo artículo 20 bis del Estatuto de los Trabajadores.
La nueva obligación empresarial sobre desconexión digital impone límites claros a los mensajes fuera de horario laboral
En una España hiperconectada, la costumbre de enviar mensajes, correos o llamadas tras la jornada se había vuelto casi automática. El legislador ha respondido tipificando la “desconexión digital” como derecho fundamental: ningún empleado está obligado a atender comunicaciones profesionales una vez concluido su horario, ni siquiera bajo modelos de teletrabajo o esquemas híbridos que multiplican los dispositivos corporativos y personales.
La pandemia de 2020‑21 disparó el trabajo a distancia y, con él, la invasión del tiempo de descanso. Para frenar esa inercia, la nueva redacción del Estatuto prohíbe controles indiscriminados sobre móviles o portátiles de la plantilla, salvo que exista política interna clara y comunicada que los justifique. Espiar un teléfono o demandar respuestas inmediatas en WhatsApp sin motivo urgente queda expresamente vetado.
El artículo 20 bis sitúa la desconexión digital al nivel de otros derechos de conciliación. Su régimen sancionador, que fija penalizaciones proporcionales al tamaño de la compañía y a la gravedad de la infracción, alcanza los 7.500 € cuando la empresa, sin causa justificada, exige disponibilidad constante o vulnera la intimidad del trabajador mediante vigilancia digital.
La medida envía un mensaje contundente: mantener la productividad no puede hacerse a costa del bienestar mental. Expertos prevén que los departamentos de recursos humanos revisen turnos, canales de comunicación y protocolos de urgencia para evitar contactos indebidos y posibles expedientes de la Inspección de Trabajo.
Recomendaciones para que las compañías respeten el artículo 20 bis y eviten sanciones ejemplares
Las organizaciones deberán implementar políticas de uso de dispositivos que delimiten horarios de respuesta y excepciones operativas (por ejemplo, emergencias o guardias debidamente compensadas). Además, los trabajadores disponen ahora de vías internas (comités de empresa) y externas (Inspección de Trabajo) para denunciar reiteraciones de mensajes fuera de horario.
Cuando la infracción se constate, la autoridad laboral graduará la sanción atendiendo a la reiteración y a la ausencia de compensación o justificación. Por ello, los expertos aconsejan registrar los contactos imprescindibles y comunicar de forma transparente cualquier excepción al derecho de desconexión.
Estudios recientes señalan que casi un 40 % de los empleados sufría desgaste emocional por la dificultad de “desenchufarse”. Con la nueva norma, la previsión es que la conciliación familiar mejore, disminuya el absentismo y se eleve la motivación, generando una productividad más sostenible.
En este sentido, la reforma no solo protege al individuo: al fomentar culturas basadas en la confianza y el respeto, posiciona a España como referente europeo en regulación laboral avanzada. Las compañías que abracen esta filosofía obtendrán una ventaja competitiva al atraer y retener talento que valora, por encima de todo, su tiempo personal. Entra en nuestra sección de empleo para conocer todos los derechos de los trabajadores.