A muchos lectores se les vendrá la Atlántida a la cabeza al momento de leer las palabras “ciudad perdida”, pero no, básicamente porque es una ciudad ficticia. Hablamos de una ciudad maya. Hacia el 950 d.C., el período clásico de los mayas comenzó a colapsar y sus principales asentamientos se abandonaron. Cuando llegaron los descubridores españoles, estos estaban presentes de forma dispersa. Ese fue el principio del fin para esta civilización, aunque a día de hoy, quedan descendientes de estos. Los lacandones, conocidos como Hach Winik, son el vestigio que queda de ellos. Pero no es el único. En este artículo indagaremos en el descubrimiento de una megaciudad encontrada en la selva.
¿Cuál es la ciudad perdida que han encontrado los arqueólogos?
Sorpresa en el mundo arqueológico. Se ha desvelado el secreto de una antigua megaciudad maya oculta bajo la densa selva de Yucatán. Bautizada como Valeriana, esta ciudad perdida ha permanecido oculta durante más de mil años, sin ser vista por los radares de exploración y revelando una faceta desconocida de una de las civilizaciones más fascinantes de Mesoamérica. El descubrimiento, gracias a la tecnología avanzada y a la meticulosa investigación, ha reavivado el interés por el mundo maya y ha abierto nuevas puertas al conocimiento de esta cultura ancestral.
Valeriana no fue encontrada mediante excavaciones tradicionales, sino gracias a una herramienta tecnológica revolucionaria: el LiDAR. Esta tecnología de teledetección láser, permite penetrar la espesa vegetación y crear mapas detallados de la superficie terrestre, revelando estructuras ocultas bajo la capa vegetal.
La magnitud de Valeriana es asombrosa. Con más de 6.600 estructuras identificadas, incluyendo pirámides, plazas, campos de juego y una extensa red de calzadas, esta ciudad rivaliza en tamaño y complejidad con los centros urbanos mayas más grandes conocidos. Su ubicación en la selva del Yucatán, podría hacer pensar que Valeriana jugó un papel crucial en la red comercial y política de la región durante el Período Clásico Maya (250-900 d.C.).
Esta ciudad perdida ofrece una ventana sin precedentes a la vida cotidiana de los mayas, sus creencias religiosas, su organización social y su avanzada ingeniería. Las estructuras monumentales, la complejidad de su urbanismo y la evidencia de actividades rituales sugieren que Valeriana fue un centro político y religioso de gran importancia.
Además, el hallazgo de esta plantea nuevas preguntas sobre el colapso de la civilización maya. ¿Qué motivos llevaron al abandono de esta próspera ciudad? ¿Cómo se relacionaba Valeriana con otras ciudades mayas de la región?
¿Qué motivos llevaron a la desaparición de los mayas?
El motivo más evidente es la llegada de los descubridores españoles, pero no es el único. Alrededor del año 820 d.C., la región fue devastada por 95 años de sequías, algunas de las cuales se prolongaron durante décadas, lo que no ayudó a que siguieran prosperando como civilización. ¿Cómo sabemos eso? Hubo una disminución del 70% en las inscripciones en calendario de piedra en la segunda mitad del siglo IX. Este mismo patrón de descenso también se refleja en las fechas de radiocarbono en toda la región norte, que indican que la construcción con madera también se redujo durante el mismo período.
La guerra y la inestabilidad sociopolítica en toda el área maya fue otro de los motivos para su fin. Fuera cual fuera el motivo principal para su desaparición, lo que queda claro es que aún falta mucho por aprender sobre esta fascinante cultura.
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