Desde el 12 de agosto, ninguna tasación podrá ignorar la exposición de la vivienda a inundaciones, incendios o deslizamientos de tierra. Así lo fija la Orden ECM/599/2025, publicada en el BOE el 12 de junio de 2025, que actualiza la Orden ECO/805/2003. No es poca cosa: cambia cómo se valoran los inmuebles y, por tanto, las condiciones de financiación y seguros.
Quién debe aplicar los riesgos climáticos y qué factores se evalúan en la nueva tasación obligatoria
Bancos, aseguradoras y fondos deberán integrar la variable climática antes de conceder hipotecas, valorar carteras o fijar pólizas. ¿Qué tendrá que recoger ahora el informe de valoración?
- Proximidad a ríos o al mar y riesgo de inundación.
- Posibles incendios forestales o deslizamientos de tierra.
- Consumo de agua y contaminación generada por el edificio.
- Certificado de Eficiencia Energética (si existe), incluso cuando no sea obligatorio.
Además, la tasación incorporará información climática ligada al entorno y al propio inmueble, aportando transparencia sobre rendimiento energético y consumo de recursos. La actualización normativa entra en vigor el 12 de agosto y adapta la valoración a la realidad de la crisis climática. Para situarlo de un vistazo, estos son los datos clave:
Una vivienda en zona inundable puede ver reducido su valor hipotecario y encarecer el crédito. ¿Qué significa esto para tu hipoteca? Que el precio hipotecario considerado por el banco se ajustará al riesgo climático identificado. Las aseguradoras, por su parte, adaptarán pólizas y primas: más coste en zonas expuestas y posibles descuentos para edificios eficientes y resilientes.
Cambios en las superficies tasadas y su impacto en el valor final del inmueble
La reforma distingue entre espacios habitables y otras zonas: terrazas, jardines o trasteros pasan a valorarse por separado. Esto evita distorsiones y refleja mejor el uso real. Una terraza en ciudad puede pesar más que un trastero en las afueras, por ejemplo. Para dinamizar la oferta, los ayuntamientos podrán otorgar una autorización previa que permite ejecutar hasta el 60% del proyecto si se cumplen parámetros urbanísticos esenciales. Pero cuidado, las promotoras deberán registrar la declaración de obra nueva en construcción según la Ley de Suelo y Rehabilitación Urbana.
En tasaciones en masa, se exige más control y transparencia: las sociedades de tasación detallarán metodología y criterios de los modelos automatizados. Esos algoritmos deberán incluir la variable climática y reflejar el precio hipotecario real, no solo el de mercado. Accede a nuestra sección de actualidad para conocer otras noticias de interés.