La edad de jubilación en España cambia periódicamente. A partir del 1 de enero de 2025, se producirá un ajuste al alza en la edad mínima para acceder a la jubilación anticipada, poniendo fin a la posibilidad de retirarse a los 63 años. Esa medida, incluida en la reforma del sistema de pensiones, busca garantizar la sostenibilidad del sistema a largo plazo y adaptar la edad de jubilación a la creciente esperanza de vida. Además, no podemos olvidar la viabilidad del pago de estas en el futuro. A continuación indagaremos en los pormenores de esta medida.
¿Qué cambios implica el cambio en la jubilación anticipada?
Con la nueva normativa, la edad mínima para acceder a la jubilación anticipada se elevará progresivamente hasta los 64 años y 8 meses. Sin embargo, esta cifra no será igual para todos los trabajadores, sino que dependerá del número de años cotizados. Aquellos que hayan cotizado al menos 38 años y 3 meses podrán acceder a la jubilación anticipada a los 63 años. Este incremento en la edad de jubilación anticipada tiene como objetivo reducir el gasto público en pensiones y garantizar la sostenibilidad del sistema a largo plazo. Además, se busca incentivar la prolongación de la vida laboral y reducir la brecha entre la edad de jubilación y la esperanza de vida.
Este cambio afectará principalmente a aquellos trabajadores que estaban planeando jubilarse anticipadamente a los 63 años y que no cumplen con los requisitos de cotización para acceder a esta modalidad. El aumento de la edad de jubilación anticipada tendrá diversas consecuencias, tanto a nivel individual como a nivel colectivo. Por un lado, los trabajadores se verán obligados a retrasar su jubilación, lo que puede tener un impacto en sus planes de vida y en su economía familiar. Por otro lado, a nivel colectivo, esta medida podría contribuir a reducir el desempleo entre los jóvenes y a aumentar la productividad de la economía. Habrá que esperar para ver las consecuencias reales de esta medida.
¿Qué penalizaciones hay por jubilarse anticipadamente?
Como se puede suponer, la jubilación anticipada trae consigo una serie de penalizaciones. La Seguridad Social aplicará unos coeficientes reductores que irán desde el 2,81% y el 21% de la cuantía final, dependiendo de los años que se hayan cotizado y del tiempo del adelanto de la jubilación. Para este próximo 2025, este sería el resultado:
- Menos de 38 años y seis meses cotizados: 21% de reducción si la jubilación se adelanta dos años, y 3,26% si es solo un mes antes.
- Entre 38 y 41 años y seis meses cotizados: 19% con dos años de adelanto, 3,11% si es un mes antes.
- Entre 41 y 44 años y seis meses cotizados: 17% con dos años de adelanto, 2,86% si se adelanta un mes.
- Más de 44 años y seis meses cotizados: 13% dos años antes, y 2,81% si es un mes antes.
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