Un vídeo viral de Sezar Blue pone en duda la claridad del envase de unos berberechos Hacendado y reabre el debate sobre el etiquetado alimentario.
A todos nos ha pasado: coges una lata, miras el frontal y das por hecho que ya lo tienes todo claro. Luego llegas a casa, le das la vuelta al envase y, sorpresa, la letra pequeña te cuenta otra película. Eso es justo lo que ha encendido una polémica en redes con unos berberechos de Hacendado, la marca blanca asociada a Mercadona. La historia se ha viralizado después de que el influencer gastronómico Sezar Blue lo señalara en un vídeo publicado en YouTube. Según lo mostrado, en la parte delantera se ve un tamaño “M” (que muchos interpretan como “medio”), pero en la parte trasera se clasificarían como “pequeños”. Y claro, cuando el envase parece decir 2 cosas distintas, la confianza del comprador se pone a prueba.
¿Qué pone exactamente en el envase de los berberechos Hacendado que aparecen en el video de Sezar Blue?
Según lo que enseña el vídeo, el posible choque está entre lo que se ve “a simple vista” y lo que aparece en las especificaciones del reverso. En el frontal del envoltorio o caja figuraría el tamaño “M”, mientras que en la parte posterior, dentro de la información detallada y en letra más pequeña, se indicaría que el tamaño es “pequeño”. Esa diferencia ha llevado a algunos usuarios a hablar de “engaño al consumidor” y a pedir explicaciones.
El problema, tal y como se plantea, no es solo el detalle en sí, sino la sensación de incoherencia: si delante sugiere una cosa y detrás especifica otra, lo que se está haciendo es engañar al consumidor a drede.
El hallazgo, siempre según lo descrito, aparece durante una comparativa en la que Sezar Blue enfrenta productos “premium” de El Corte Inglés con alternativas más económicas de Mercadona. En esa revisión se fijaría en aspectos como la calidad percibida, el precio y la presentación, y ahí es cuando se detiene en el envase de los berberechos para señalar la aparente contradicción del tamaño.
Este tipo de polémicas suelen tocar 2 puntos sensibles, y no precisamente pequeños. El primero es la expectativa de compra: el tamaño o categoría del marisco en conserva influye en la percepción de calidad y en la decisión de compra. Y el segundo es la confianza del consumidor: incluso si hubiera una explicación técnica (por ejemplo, criterios internos o un cambio de proveedor, que no lo es, ya que tienen también del tamaño S), la falta de claridad se puede interpretar como poca transparencia.
¿Qué puede hacer un consumidor si ve un etiquetado engañoso en un producto?
Si compras un producto y sientes que el etiquetado no es claro o podría inducir a error, se recomienda documentar bien lo que aparece en el envase y dejar constancia de la incidencia por las vías habituales. Estos son los pasos a seguir si quieres poner una queja:
- Guardar el ticket y el envase.
- Hacer fotos del frontal y del reverso donde aparezcan las menciones de tamaño.
- Solicitar una hoja de reclamaciones (si procede), es decir, el documento para dejar la queja por escrito.
- Presentar la incidencia ante la OMIC (Oficina Municipal de Información al Consumidor) de tu localidad o pedir aclaraciones al servicio de atención al cliente del establecimiento, aportando imágenes y datos del lote.
Como hemos mencionado anteriormente, esta información está sacada del último video de Sezar Blue. Para quien quiera revisarlo, lo adjuntamos en este mismo artículo. Para el video en el minuto 15 y 10 segundos para ir directo al grano. También puedes conocer otras noticias del sector de la alimentación accediendo a nuestra sección de actualidad.








