Desde ayer, martes 20 de mayo de 2025, el precio de la bombona de butano ha vuelto a incrementarse en España, marcando la quinta subida consecutiva desde septiembre de 2023. La revisión bimestral del coste, regulada por el Gobierno, ha fijado un nuevo precio máximo de 17,66 euros por bombona estándar de 12,5 kilogramos, lo que supone un aumento del 4,9 % respecto al valor anterior (16,83 euros).
Esta variación viene dada por la evolución del mercado internacional del gas licuado del petróleo (GLP), al encarecimiento de los fletes y a la depreciación del euro frente al dólar. El nuevo precio se mantendrá vigente hasta el tercer martes de julio, cuando se realice la próxima actualización. El coste afectará sobre todo a hogares en zonas rurales y de difícil acceso al gas canalizado, donde el butano sigue siendo el rey de las fuentes energéticas.
¿Por qué sigue subiendo el precio de la bombona de butano?
El precio de la bombona de butano se determina cada dos meses conforme a una fórmula establecida por el Ministerio para la Transición Ecológica. En ella se tienen en cuenta varios factores: la cotización internacional del GLP, el tipo de cambio euro-dólar y los costes de transporte marítimo. Durante el último periodo de revisión, todos estos componentes han subido su coste.
El gas licuado del petróleo ha subido en los mercados internacionales por el repunte de la demanda en Asia y la inestabilidad en zonas productoras. Al mismo tiempo, los fletes marítimos han encarecido el transporte de este tipo de energía por el incremento de costes logísticos globales. Por su parte, el euro se ha devaluado frente al dólar, encareciendo las importaciones de materias primas energéticas. La revisión del precio está sujeta a un límite de variación del 5 % hacia arriba o hacia abajo en cada actualización, para evitar cambios bruscos en el coste final al consumidor. En este caso, se ha aplicado prácticamente el máximo permitido, un 4,9 %.
¿A quién afecta y qué medidas existen?
Según los últimos datos del Ministerio, más de ocho millones de bombonas de butano se encuentran en circulación en España. Aunque su uso ha disminuido con la expansión del gas natural y las energías renovables, sigue siendo esencial para muchas familias en entornos rurales, para viviendas no conectadas a redes de gas canalizado, y también en algunos negocios del sector hostelero y agrícola.
El Gobierno mantiene vigente el sistema de precio regulado para garantizar el acceso asequible a esta fuente energética. Sin embargo, el aumento continuado del precio plantea dudas sobre como repercutirá en los hogares con menos recursos. Para estos casos, existen mecanismos de ayuda, como el bono social térmico, una ayuda directa que se concede a consumidores vulnerables y que puede emplearse para sufragar parte del gasto en calefacción, agua caliente o cocina, incluyendo el uso de bombonas. Sigue nuestra sección de actualidad para no perderte ninguna novedad.