El pasado sábado 12 de abril, un avión de Air Nostrum que cubría la ruta entre Madrid y Pamplona fue alcanzado por un rayo durante su aproximación al aeropuerto de Noáin. El vuelo, identificado como IB1055, había despegado del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas alrededor de las 20:30 horas con aproximadamente 80 pasajeros a bordo. A unos 35 minutos de vuelo, cuando la aeronave se encontraba cerca de su destino, un rayo impactó en su fuselaje. Aunque el incidente generó un momento de tensión entre los pasajeros, no se reportaron heridos ni daños estructurales significativos.
¿Qué pasó exactamente en el avión que viajaba de Madrid a Pamplona?
El impacto del rayo se produjo en medio de condiciones meteorológicas adversas, con tormentas eléctricas sobre la Comunidad Foral de Navarra. Uno de los pasajeros, Ricardo Goñi, describió el momento como un «fogonazo» acompañado de un fuerte ruido y una breve disminución de las luces en la cabina. El comandante informó a los pasajeros que este tipo de incidentes son más comunes de lo que se piensa y que, por precaución, se procedería a regresar a Madrid para una revisión técnica.
La tripulación mantuvo la calma y proporcionó información constante a los pasajeros, quienes, a pesar del susto inicial, permanecieron tranquilos durante el resto del vuelo. Al aterrizar en Madrid, la aerolínea ofreció una cena ligera a los pasajeros y organizó un servicio de autobús hacia Pamplona para aquellos que deseaban continuar su viaje esa misma noche. Otros optaron por pernoctar en Madrid y volar al día siguiente.
Siguiendo el protocolo de seguridad, el comandante decidió regresar al aeropuerto de Madrid para una inspección técnica de la aeronave. Los pasajeros fueron informados de la situación y, tras el aterrizaje, la aerolínea les ofreció asistencia y opciones para continuar su viaje. El avión fue revisado y posteriormente volvió a operar con normalidad.
¿Cuáles son los procedimientos de seguridad?
El protocolo de seguridad en casos de impacto de rayo en aeronaves establece la necesidad de una inspección técnica antes de que el avión pueda volver a operar. En este caso, la revisión no encontró daños significativos, y la aeronave fue autorizada a reanudar sus vuelos al día siguiente. Las aerolíneas están preparadas para manejar este tipo de situaciones y cuentan con procedimientos establecidos para garantizar la seguridad de los pasajeros y la tripulación.
Es importante recordar que el avión es un transporte seguro, sobre todo si se le compara con los coches. Ahora bien, el pasado año 2024 fue el que más víctimas tuvo desde 2018. Según la Red de Seguridad Aérea, un total de 318 personas murieron en accidentes aéreos el año pasado. Síguenos en nuestra sección de actualidad para conocer las noticias más interesantes del día a día.